Es muy importante saber cómo cuidar tu piel en verano, para que se sienta mejor, más resistente y capaz de protegerse a sí misma. Sigue estos consejos para proteger tu piel:
Limpieza facial profunda y delicada
Para conseguir un bronceado 100% seguro hay que preparar la piel. Antes de exponerte al sol, te recomendamos una exfoliación corporal, para eliminar las impurezas, alisarás la piel y la dejarás lista para el sol.
También es importante que, por la noche, te hagas una limpieza facial en profundidad. Para no irritar aún más tu cara, mejor si utilizas productos espumosos delicados a base de agua, evitando cosméticos grasos. Los mejores productos serán los que contienen ingredientes calmantes como aloe vera, ácido salicílico o extracto de semilla de uva.
Hidratación
Después de las actividades al aire libre o después de tomar el sol, tu piel está estresada y seca. Aplicarse fórmulas hidratantes en abundancia, sobre todo en el cuerpo, es lo mejor que puedes hacer, ya que estos productos crean un muro de protección en la superficie cutánea haciendo que el agua quede retenida en el interior. Dedícale al rostro una atención especial, puesto que la piel en esta zona es mucho más delicada y requiere de tratamientos dermatológicos más completos.
Pero también es importante saber elegir el producto adecuado para tu tipo de piel, asegúrate de que el cosmético en cuestión proporcione una hidratación intensa y sea eficaz en caso de sequedad. Además, la formulación debe ser rica en vitaminas, ya que contrarrestan el estrés oxidativo provocado por los radicales. Los productos que contienen vitaminas E y Q10 son especialmente los más adecuados.
Protección solar
Siempre hemos escuchado que tenemos que aplicar el protector solar media hora antes de exponerte al sol, esto es imprescindible, siempre sobre la piel limpia y seca. Aplícalo de forma abundante, sin miedo. Y no olvides que incluso cuando estás en la sombra o esté nublado es necesaria una protección adecuada.
La función principal de los protectores solares es protegerte de los dañinos rayos ultravioleta. Si un producto tiene un factor de protección solar, probablemente solo lo protegerá de los rayos UVB. Para prevenir imperfecciones, asegúrate de que el protector solar facial no obstruya los poros. Como alternativa al protector solar, puedes usar una crema de día con SPF integrado para ayudar a que la piel respire mejor.
La alimentación es muy importante
No abuses del consumo de carnes y decántate por las frutas, verduras y alimentos ricos en antioxidantes, que ayudarán a prevenir la degeneración celular y estimularán el flujo sanguíneo de la piel.
Beber más agua ayudará a que tu piel esté hidratada. Además de agua, puedes ingerir gazpachos, sopas frías y ensaladas, que son grandes fuentes de H2O.
Para evitar las manchas; peeling y ácido fólico
Especialmente en verano, el peeling regular es imprescindible para una piel suave y bien arreglada. La exfoliación adecuada puede liberar la zona de suciedad y sebo en profundidad, reparando la barrera natural de la piel. Dado que también debe ser particularmente suave, asegúrese de hacer un peelin suave y ligero. El mejor momento para hacerlo es por la noche.
Para las manchas también puedes utilizar fórmulas dermocosméticas que incluyen ácido fólico, el cuerpo lo usa para producir células nuevas.
Spray refrescante
En verano, la piel se ve especialmente afectada por las altas temperaturas. Precisamente por ello, recuerda cuidar la zona del contorno de ojos y labios, quizás con mascarillas, geles o cremas refrescantes. Para un efecto aún más refrescante, ¡incluso puedes guardarlos en la nevera! En esta temporada, también los refrescantes sprays faciales pueden dar un agradable alivio y dar algo de alivio en los días más calurosos.